Materiales eco-friendly, alimentos kilómetro cero, viviendas sostenibles… Tras años de despreocupación, innovación en materiales artificiales y fabricación únicamente enfocada a la máxima productividad, una corriente cada vez con más adeptos busca volver a los inicios. El back to basics responde a la conciencia cada vez más colectiva. Pero no solo triunfa por su vertiente ecológica, sino también por una estética natural, a veces rústica y otras más exótica, que ha sabido complementarse con la belleza estética. Gran ejemplo son las piezas de esta colección hechas con ratán, mimbre, madera, bambú, cuerda o terracota. Materiales 100% naturales que dan forma a muebles como mesas, sillas, baúles y todo tipo de accesorios.