La ciudad de Miami fue un polo de atracción durante el siglo XIX por sus maravillosas playas, su clima tropical y el glamour de las celebridades que la visitaban. Fue entonces cuando empezaron a levantarse impresionantes edificios art déco que llenaron la ciudad de color, deslumbrantes exteriores en tonos pastel y la hicieron conocida como la capital del art déco. Sus calles e interiores inspiran ahora la decoración de tendencia.