Desde la época de Coco Chanel a la de Karl Lagerfeld existe una clave de estilo que se mantiene inalterable: el triunfo del binomio del blanco y el negro. Dos opuestos con los que crear looks sobrios, rockeros o súper femeninos sin miedo a equivocarnos. Y en decoración sucede lo mismo. Asociar diseño con la combinación de la pureza del blanco y el toque glam del negro es sinónimo de refinamiento inmediato. Compruébalo en esta selección de divertidos cojines y placas decorativas cargadas de mensajes positivos, lámparas, butacas y otros modernos detalles. ¡Los querrás todos!