Es el ingrediente fundamental en toda casa de estilo mediterráneo. El dúo cromático azul y blanco viste los interiores de frescura creando un ambiente relajante y muy veraniego. Esta gran combinación resulta ideal para decorar casas costeras, pero también, es un acierto para dar un toque clásico a un pequeño rincón. Nos rendimos al encanto de esta mezcla que nunca defrauda en decoración.