Librerías que a la vez son cafeterías, que parecen galerías de arte y que invitan al relax, a tomarse un café y a disfrutar de una buena lectura junto a la chimenea. Hoy rendimos homenaje a estos santuarios literarios, espacios acogedores y llenos de libros donde disfrutar de unos instantes de tiempo para uno mismo en las largas tardes de invierno.