El que es un apasionado del mar lo es para toda la vida. Y sino que se lo pregunten a los surferos, siempre ávidos por cazar una buena ola. Por eso en sus casas se respira esa brisa marina que trae consigo detalles playeros y accesorios que, acompañados por muebles de esencia natural, son un reflejo de la vida surfera. ¡Es lo que tiene vivir en la cresta de la ola!