Ha llegado ese momento del año en el que nada parece más apetecible que quedarse calentito en casa. Acurrucarse en el sofá rodeados de una decoración marcada por textiles de pieles naturales, figuras decorativas de ciervos y velas de llamas titilantes. Una cálida atmósfera propia de los chalets de montaña que conseguirás recrear en casa con ayuda de las piezas de esta colección.