Protegen, añaden textura y, además, son la forma más práctica y rápida para cambiar el look del salón sin hacer grandes inversiones. Las fundas de sofá ya no son como las de antes, y es que ahora se adaptan perfectamente a la forma del sofá y son muy fáciles de colocar gracias a sus modernos tejidos. Junto con unos plaids y unos cojines a juego, la sala de estar lucirá como nueva.