Desde la cocina nos llega un dulce aroma a galletas y entramos para servirlas ayudándonos de accesorios como bandejas, tarros y otros elementos de aire romántico. Piezas que después llevamos a una sala de estar donde no faltan los marcos de fotos en tonos pastel o los prácticos colgadores decorados a base de corazones. Todo para crear una cálida y acogedora atmósfera.