Asociamos el estilo nórdico a colores neutros como el gris, el blanco o el negro para captar la escasa luz de los países escandinavos. Pero con la llegada del buen tiempo, los paisajes se tiñen de verdes aportando dulzura y luz. Así, los nórdicos integran esas tonalidades en su decoración llenándose de colores pastel para suavizar las líneas simples de su mobiliario. Conoce este nuevo nórdico.