Los tradicionales y emblemáticos muebles de la decoración nórdica dejan sitio a los estampados étnicos y a las fibras naturales en una tendencia de interiores que busca combinar lo mejor de estos dos mundos: el irresistible look folk con el scandi más relajado. Y es que, a pesar de ser estilos apuestos, sus tonos neutros y la simplicidad de sus materiales, se unen con un objetivo común.