Espacios acristalados repletos de plantas, flores y árboles crean y decoran ambientes románticos. Los ‘orangeries’ o invernaderos eran espacios muy frecuentes en las residencias aristocráticas de la alta sociedad, en los siglos XVII y XVIII. Un ambiente que cualquiera de nosotros puede disfrutar en su casa. Encuentra la inspiración en las piezas de esta selección.