Con el invierno ya instalado en estas latitudes, conviene vestir nuestra casa con piezas que aporten confort y calidez a los días. Renovar los textiles por otros más cómodos y acogedores es una de las claves, así como apostar por una iluminación íntima y puntual a través de lámparas o velas. Los tonos neutros serán otro aliado para convertir la casa en un moderno y cálido refugio esta temporada.