La elegancia y distinción en decoración tienen siempre nombre francés. Lo comprobamos en el estilo de los grandes clásicos del romanticismo, con su irresistible toque atemporal e imperecedero que conquista toda la casa. Hablamos de piezas con sello propio: sillas medallón y de cruceta, butacas y muebles con patas cabriolé, en tonos neutros, maderas nobles y tejidos naturales. Date un paseo por esta sofisticada galería y transforma tu casa en un oasis de serenidad y belleza.