Aires palatinos y estética suntuosa. Aunque la gran mayoría de palacios que hemos visto a lo largo de nuestra vida son los de los cuentos de hadas, en la vida real no solo son mármoles blancos, camas con doseles y cortinas rosas. Esta colección rescata piezas de refinamiento clásico reinventadas para encajar en espacios modernos. En ellos los espejos barrocos son protagonistas.