Hubo una época en la que los colores se empleaban en su versión más brillante, sin miedo a combinarlos entre sí y con formas juguetonas que convertían la geometría en un asunto mucho menos serio. Eran los años 80 y en ellos destacaba un grupo de diseñadores y arquitectos con sede en Milán que se autodenominaron Grupo Memphis por una canción de Bob Dylan que escuchaban sin cesar. Apostaron con descaro por materiales modernos y hoy el mundo de la moda y la decoración se inspira de nuevo en su creatividad para ofrecer piezas de diseño como estas sillas, butacas, mesas o taburetes… ¡Irresistibles!