La cocina ibicenca añade luz a todos tus platos, descrúbrela
El estilo ibicenco sigue siendo uno de los que más fans aglutina, sobre todo en casas junto al mar. Nos regala espacios diáfanos, luminosos, naturales, sencillos y relajantes, y claro… ¡¿a quién no le va a gustar algo así?! Su aire informal y acogedor lo puedes aplicar en cualquier estancia de la casa: desde el recibidor hasta el baño, y también, por supuesto, en la cocina. En este artículo vamos a ver cómo decorar tu cocina para darle un look de cocina ibicenca, un estilo que te invitará a disfrutar del slow cooking y a cuidarte mucho más por dentro y por fuera.
El estilo ibicenco sigue siendo uno de los que más fans aglutina, sobre todo en casas junto al mar. Nos regala espacios diáfanos, luminosos, naturales, sencillos y relajantes, y claro… ¡¿a quién no le va a gustar algo así?! Su aire informal y acogedor lo puedes aplicar en cualquier estancia de la casa: desde el recibidor hasta el baño, y también, por supuesto, en la cocina. En este artículo vamos a ver cómo decorar tu cocina para darle un look de cocina ibicenca, un estilo que te invitará a disfrutar del slow cooking y a cuidarte mucho más por dentro y por fuera.
Los muebles ideales para una cocina ibicenca
La cocina ibicenca se caracteriza por tener muebles en madera raw, o maderas ocasionalmente tratadas con turquesas, fucsia o blancos. Conoce todas los detalles que hacen de la cocina ibicenca un espacio de relajación infinita.
Muebles de obra
En las cocinas ibicencas los muebles de formica no tienen hueco, pero sí los muebles de obra, que son los que se llevan la palma. Hechos a medida para el espacio que ocupan, se revisten de cal, como el resto de las paredes. Además, cuentan con puertas y cajones de madera. Muchas veces, estos frontales son celosías para mantener el interior de los armarios siempre aireado y fresco. Por otro lado, en las cocinas ibicencas a menudo solo hay muebles en la parte inferior, dejando la zona más alta para el extractor –también de obra encalada– y algunas baldas. Y en cuanto al color, los frentes de madera puedes dejarlos al natural o bien pintarlos de blanco de forma irregular o de azul turquesa o añil.
Muebles de madera y cuerda
Para acompañar a los muebles de obra, las cocinas ibicencas cuentan también con piezas de madera como mesas de office, sillas, aparadores, vajilleros, etc. La madera natural, en bruto y con un punto envejecido, queda perfecta en este tipo de cocinas. También las sillas con asiento de cuerda, tradicionales y muy decorativas.
Muebles de oficio
Por supuesto, si entre los muebles que completan la cocina puedes disponer de alguna pieza vintage como podría ser una mesa tocinera o un mostrador recuperado, lo tendrás todo para que tu cocina ibicenca adquiera toda la esencia y la magia.
De suelo a techo
En las casas ibicencas, los envigados de madera tienen mucho protagonismo. Las vigas se pueden dejar al natural o bien pintarlas de azul o de blanco, con una capa fina que deje entrever el color de la madera. ¿Y en el suelo? Las baldosas de barro artesanales son muy típicas de las cocinas ibicencas, pero también lo es –sobre todo en las cocinas ibicencas más modernas– el microcemento. Este material tiene la ventaja de generar sensación de suelo continuo, lo que hace que los espacios se perciban más grandes.
¡Ah! ¡No nos dejemos las paredes! Hemos dicho que las paredes encaladas son 100% ibicencas. Aunque también lo son las paredes de piedra, que aportan a la cocina un toque mucho más rústico y cálido que la cal. Y las ventanas de madera, pintadas de azul turquesa o añil, son otro distintivo de las casas ibicencas. Marcos y contraventanas en azul nos remitirán al mar, a la brisa, y añadirán frescura al espacio.
Encimeras frescas y prácticas
En las cocinas ibicencas, las encimeras también tienen su personalidad. El mármol, el Silestone o el Corian, por ejemplo, no suelen utilizarse, pero sí el microcemento protegido para resistir el desgaste; la madera y, sobre todo, los azulejos de cerámica con un tamaño de 10 x 10 cm, aproximadamente, en colores claros o también en azules que recuerden el mar de la isla pitiusa. A veces, esos mismos azulejos suben por la pared protegiendo el antepecho, pero en la mayoría de cocinas ibicencas se aplican exclusivamente en la encimera.
Cuestión de detalles
• Madera:para los útiles, apuesta por la madera clara. Es un material natural y, a la vista, dará calidez al espacio. Cuelga las tablas de cortar de madera o apóyalas en la encimera, coloca un bol con fruta fresca a la vista, tus cucharones déjalos en un tarro junto a los fogones, utiliza bandejas de madera, etc.
• Fibras vegetales: como la madera, las fibras vegetales son un must de las cocinas ibicencas. Elígelas para lámparas sobre la mesa de office, para cestos donde poner las verduras o las frutas, como bajoplatos, como alfombras, etc.
• Algodón y lino: elige manteles, servilletas, cortinas e incluso alfombras en estos textiles naturales. En el suelo, apuesta por alfombras tipo kilim de colores cálidos como los tonos tierra combinados con negros y neutros, ¡verás qué bonito queda!
• Azul, siempre azul: para vajillas y cristalería, apuesta por loza y cristal tintado en tonos azulados. Las vajillas de estilo Wabi Sabi quedan perfectas en este tipo de cocinas porque su aspecto artesanal e informal las hace encajar con el look boho ibicenco.
• Plantas y más plantas: el estilo de decoración ibicenca está claramente unido a la Naturaleza, ya que los materiales que se utilizan son naturales. Así que, en un espacio así, las plantas siempre irán que ni pintadas. Pequeñas macetas con hierbas aromáticas, algunas crasas decorando rincones, sansvieras o montreras, si quieres plantas verdes que crezcan mucho, y flores blancas para darle un toque campestre a la mesa, serán perfectas para decorar tu cocina ibicenca.
Ahora que ya sabes las claves para tener una cocina ibicenca en casa, ponte manos a la obra y empieza a disfrutar de un espacio ideal para trabajar sin prisas y degustando cada bocado como debe ser. ¡Que la disfrutes, masterchef!