¡Regístrate ahora y consigue un vale regalo de 30€!
Cocina estilo escandinavo en tonos blanco y negro

Nos fascina su naturalidad, la elegancia y discreción de sus colores, el aprovechamiento de los espacios y la luz, la versatilidad de su mobiliario… Son muchos los motivos por los que elegimos una cocina nórdica, perfecta combinación de funcionalidad y diseño. Pero, ¿cómo podemos trasladar a nuestro hogar la practicidad y la calidez que las caracteriza? Desde Westwing hemos elaborado una breve guía de decoración nórdica para que lleves este revolucionario estilo escandinavo entre fogones. ¡Te encantará el resultado! 

Cocina nórdica: apuesta por la sencillez 

El diseño escandinavo es, ante todo, un modo de entender el mundo. Por ello, la simplicidad y la funcionalidad de este estilo de vida sencillo inspiran la elección de espacios, muebles y materiales. 

El primer paso hacia esta apuesta por el minimalismo es incluir en nuestra cocina solo lo necesario (quizás nos ayude preguntarnos cuántos de los utensilios que tenemos empleamos realmente) y apostar por muebles versátiles y prácticos que presten, incluso, más de un servicio. 

La decoración de la cocina nórdica sigue también este mismo principio de «menos es más». Por norma general se prescinde de accesorios decorativos innecesarios y son las propias lámparas, las alfombras o la originalidad en los acabados del mobiliario los que aportan la elegancia y distinción al espacio. Son algunos pequeños detalles, muy sencillos, los que marcan la diferencia y realzan la belleza de la estancia. Apuesta por flores frescas en un jarrón, velas, paños monocromáticos, tablas en madera, vajillas de cerámica de inspiración rústica o cuadros minimalistas. 

La limpieza y el orden, en gran medida indisociables, son otros dos de los aspectos que caracterizan el Scandi Chic: nos encanta la sensación de amplitud que, a simple vista, nos devuelven las encimeras despejadas y los espacios recogidos. Para los daneses, finlandeses, suecos y noruegos, una cocina ordenada y limpia es una necesidad absoluta. Por eso, muebles como las estanterías de pared o un carro de servicio son ideales para ocultar el menaje. Otros elementos de almacenaje (como botes de cristal para los cereales o las legumbres a granel, cajoneras abiertas en madera o cajas con cierre hermético) son también un imprescindible en las estanterías y alacenas de las cocinas nórdicas. Otro gran truco es integrar todos los electrodomésticos en el propio mobiliario. Con ello, conseguiremos librar las superficies, facilitaremos la limpieza y daremos a la estancia esa sensación de equilibrio y armonía que tanto nos gusta. 

Cocina nórdica: deja que entre la luz 

La luminosidad y la sensación de amplitud son otra de las características que nos enamoran de las cocinas nórdicas, capaces, incluso, de engrandecer visualmente hasta los espacios más reducidos. 

Todos sabemos que en Suecia, Dinamarca, Finlandia o Noruega las horas de luz son escasas y se convierten en un bien preciado. Por eso mismo y de manera muy inteligente, el interiorismo escandinavo ha sabido implementar la luz natural con grandes ventanales y olvidándose por completo de las cortinas. Un aprovechamiento lumínico, además, muy eco-friendly, con el que podremos prescindir en gran medida de la luz artificial. 

Cocina nórdica: elige tonos neutros 

La combinación equilibrada de colores discretos es otro de los secretos mejor guardados del interiorismo escandinavo. Especialmente popular es la acertada mezcla de blanco y gris claro con pequeñas notas de color

Además de una acertada selección de tonos neutros, otro requisito para que un color triunfe en tu cocina es la coherencia entre todos los elementos. Y es que en las cocinas nórdicas no sólo los tonos de las paredes, también los materiales, los utensilios y todos los accesorios elegidos se rigen por el mismo criterio cromático. 

Color y textura en las paredes 

Para las paredes, elige también siempre un tono neutro y, en ocasiones, puedes permitirte jugar con el contraste. ¿Qué tal elegir una pared frontal en gris oscuro arropada por un blanco roto en otras zonas de la cocina? También los revestimientos pueden buscar el contraste. La madera y la piedra siguen siendo los acabados preferidos de este estilo pero, los azulejos, entran cada vez con más fuerza en el diseño nórdico. Elige un patrón elegante en tonos neutros y dale a tu pared esa nota de originalidad y textura. 

El efecto de los colores claros 

Los colores claros son una excelente opción para una cocina escandinava. Sobre todo, los colores pastel, como el azul claro, el rosa palo, el vainilla o el verde menta. ¿Su efecto? Irradian luminosidad y consiguen crear un ambiente luminoso y agradable en combinación con el blanco. 

El contraste y los estampados 

¿Tienes una cocina en gris o en negro? No hay problema, también puedes transformarla con estilo: elige tonos verdes, rojos o azules para destacar pequeños elementos y aportar un toque de emoción a la estancia. 

Los estampados también son imprescindibles en una cocina escandinava. Eso sí: los preferidos serán los motivos geométricos y los estampados de hojas, los favoritos en cojines, cortinas y alfombras. 

Cocina nórdica: materiales muy naturales 

La sencillez y ligereza del look nórdico se consigue en muchas ocasiones con la naturalidad de los materiales. Las maderas claras sin tratar, como la de pino, son una de las elecciones predilectas. Pero también funcionan muy bien las cestas de almacenamiento de yute, que además resultan muy prácticas, las fundas de cuero en los asientos, las pieles, los cojines y los paños de cocina en algodón o lino. Todos ellos suman comodidad y calidez a la cocina. 

Para aportar un pequeño contraste, la parte frontal de los armarios en blanco y las sillas con detalles metálicos armonizan y equilibran el ambiente. La creatividad está permitida, por supuesto, el único requisito es perseguir la coherencia en los acabados para conseguir el encanto natural de la decoración norteña.  

Cocina nórdica: que no falten las plantas 

Hasta ahora hemos visto cómo el color, el orden, los materiales y las texturas aportan esa sobriedad, funcionalidad y claridad que caracterizan el diseño nórdico. Pero hay algo muy representativo de este estilo que todavía no hemos mencionado: ¡las plantas! Sin ellas no reconoceríamos una auténtica cocina nórdica. 

Cactus, plantas colgantes, plantas de aire, aloe veras… Las posibilidades son prácticamente infinitas para aportar ese toque natural, orgánico, verde, fresco y lleno de alegría a nuestra cocina. Las macetas que elijas para tus plantas bien pueden ser la guinda del pastel. En cerámica, en madera natural o en yute, son un elemento decorativo que aporta un resultado espectacular. 

Cocina nórdica: busca tu personalidad 

Hasta ahora hemos viajado por esta guía que en Westwing hemos diseñado para ti por cada uno de los pasos imprescindibles con los que transformar tu cocina tradicional en un espacio de inspiración nórdica. 

Sin embargo, lejos de buscar estancias idénticas, en Westwing nos encantan los espacios llenos de personalidad, por eso te proponemos, como último consejo, que si estás pensando en darle ese cambio de look a tu cocina lo hagas buscando aquello con lo que más identificado te sientes. Ya sabemos que lo que aporta modernidad a una cocina nórdica es el minimalismo: los frentes de cocina sin tiradores, las líneas rectas y el diseño claro. Pero puede que te apetezca combinar estos elementos con otros estilos que aporten mayor calidez. 

¿Quizás una cocina nórdica con toques vintage? La combinación de texturas y materiales ya forma parte de este estilo, en el que los diseños geométricos se fusionan con baldosas hidráulicas, con muebles antiguos de madera en estilo shabby chicalfombras orientales o vajillas de época que dan al interior un encanto romántico sin restarle ligereza al aspecto moderno. Y es que cada vez es más frecuente la mezcla de estilo Scandi Chic con el estilo rústico: una opción excelente para quienes buscan reformar su cocina rural cuando se ha quedado anticuada. 

Para los amantes del diseño industrial, la fusión del estilo escandinavo con los materiales ásperos y el aspecto crudo es otro gran acierto. Puedes crear una mezcla emocionante y llena de estilo añadiendo grandes luces colgantes sobre la mesa del comedor, sillas de hierro macizo y una paleta en blanco, negro y tonos pastel.  

Sea cual sea tu estilo preferido, en Westwing encontrarás las mejores opciones de diseño para crear una cocina nórdica llena de personalidad propia que alegrará cada comida y enamorará a tus invitados. 

Comprueba nuestra oferta de accesorios de cocina al estilo nórdico: