Cocinas modernas blancas: espacios luminosos y minimalistas

Ventajas de las cocinas modernas blancas

La primera ventaja directa de elegir la decoración en blanco para tu cocina tiene que ver, precisamente, con las propiedades del blanco como color: además de incrementar la sensación visual de amplitud de cualquier espacio, el blanco aporta luminosidad natural, nos permite aprovechar cada rayo de sol que entra en el hogar y realza ángulos, volúmenes y formas.

La psicología del color de presta especial atención al blanco: se trata del color natural más puro y difícil de encontrar, ya que es una superposición de todos los colores y en él confluye la luz al completo. Por ello, a menudo, la inocencia, la pureza o la paz son representadas con este color.

Las cocinas blancas modernas son por ello fetiche del diseño moderno, que confía el minimalismo a las propiedades del blanco. Además, este tipo de cocina resulta más ligero, haciendo que las alacenas y los armarios numerosos que habitualmente reúne este espacio no se hagan tan pesados para el ojo; nos aporta una sensación de higiene y asepsia inmediata, ya que el blanco se asocia a limpieza y desinfección; consigue crear un espacio atemporal que nunca pasará de moda, con una buena base de color sobre la que se pueden ir introduciendo pequeños cambios con el paso del tiempo para mantenerlo actualizado y, por supuesto, las cocinas blancas resultan fácilmente combinables, ya que este tono va bien con todo tipo de colores, estilos de decoración y materiales.

Ahora que tenemos claras todas las ventajas de apostar por el blanco como color base para tu cocina, veamos cómo puedes conseguir un espacio de diez con los mejores consejos de nuestros interioristas.

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¿Por qué las cocinas modernas blancas necesitan un contrapunto?

Veamos la cara b de este color: es muy cierta su capacidad para transmitir luminosidad, amplitud, pureza, higiene y muchas otras cualidades, sí, pero igualmente cierto es que una apuesta excesiva por el blanco puede generar también una sensación de impersonalidad y frialdad en el espacio, similar a la que sentimos en una sala de espera.

Para evitar este efecto, se hace imprescindible ofrecerle al blanco en nuestra cocina un buen contrapunto. ¿Qué elementos pueden conseguirlo? Muy sencillo: los colores y/o las texturas.

Podemos jugar a combinar el blanco con otro tipo de acabados que nos proporcionen tonalidades naturales de contraste y, en este sentido, la madera es una gran opción que tiene mucho que decir. No en vano, el blanco con madera es uno de los acabados fetiches del estilo nórdico, mundialmente conocido por la delicadeza, el equilibrio y la elegancia de sus diseños.

Pero no solo, el ladrillo, la piedra, los azulejos, los materiales orgánicos como las plantas, el barro, los textiles de fibras naturales… Todo ello nos irá ofreciendo suntuosas texturas que contraponer al blanco.

Para los más atrevidos, los toques de color pueden ser los contrapuntos preferidos. Una de las grandes ventajas de elegir el blanco como base es que permitirá las apuestas de color más vibrantes y enérgicas sin que el resultado sea sobrecargado. El rojo, el negro o un amarillo chillón pueden ser colores perfectamente válidos para introducir elementos en los electrodomésticos, en el mobiliario o en la decoración que contrasten con el blanco. ¡Guau!

Los detalles que marcan la diferencia en las cocinas modernas blancas

Bien, hasta aquí, tenemos muy claras dos cosas: el blanco es un color ideal para ofrecer una buena base a nuestra cocina gracias a sus múltiples cualidades y siempre necesita un contrapunto. Veamos ahora cómo conseguir una cocina moderna en ensueño en tonos blancos agregando esos pequeños detalles que te dejan boquiabierto cuando accedes a un espacio.

Azulejos vitrificados en cocinas modernas blancas

Consigue aún más luminosidad y brillo instalando este tipo de azulejos en las paredes de tu cocina. ¡Nos encanta! Y si quieres un toque de lo más original, elige algún diseño geométrico para las paredes. ¿Otra ventaja? Los azulejos de este tipo absorben mejor la grasa y son muy fáciles de limpiar, por lo que te ayudarán además a mantener tu cocina siempre perfecta.

Acabados de lujo para cocinas modernas blancas

El mármol beige es un acabado de lujo para cocinas modernas que busquen ese toque chic que pocos acabados pueden dar. Quedará increíble en las encimeras y en algún elemento estrella y protagonista como la península o la isla de cocina.

No tienes que sacrificar en minimalismo y modernidad por apostar por materiales como el mármol beige: en combinación con pequeños toques dorados en tiradores y lámparas te ayudará a conseguir esa cocina de ensueño que estabas buscando.

Materiales que suman calidez a las cocinas modernas blancas

El color blanco ya es por sí paz, pureza y calidez, pero la cocina puede ser todavía un lugar más acogedor si elegimos materiales como la madera, los elementos de fibra, cestas en los estantes abiertos a la vista y alguna maceta y lámparas de mimbre. ¡Una cocina de revista!

Cocinas modernas blancas que caen rendidas a tus pies

Por último, tengamos en cuenta un detalle no menos importe: el suelo de nuestra cocina. Porcelánicos, laminados… Las opciones son múltiples, pero, eso sí, debemos apostar por un exquisito cuidado. La funcionalidad es aquí también un aspecto básico. Y es que tratándose de la cocina, es importante que ésta cuente con un material no solo bello, sino también de fácil limpieza. Por ello, aunque la combinación con madera nos encanta para cocinas modernas blancas, no es el material que recomendaríamos para los suelos.

¿Has anotado ya todos los consejos de nuestros interioristas? Entonces solo queda ponerlos en práctica y disfrutar del resultado. ¡Buen provecho!