Mini cocinas: cómo sacarle el máximo partido en 4 pasos

Mini cocinas compactas: todo en uno 

La proliferación de espacios reducidos ha desatado la creatividad para convertir un lugar de pequeñas dimensiones en una estancia multifuncional que incluya todas las comodidades. Por ello, las mini cocinas compactas son ya una tendencia de interiorismo en nuestro país, que abrazan el minimalismo sin renunciar a la originalidad y el diseño. 

Si vives en un loft o en un pequeño apartamento posiblemente sepas muy bien a qué nos referimos. Las necesidades del espacio demandan a gritos la polivalencia y resulta ideal poder integrar la zona de cocción, refrigeración y almacenamiento en un único lugar. ¿Sueño utópico o realidad? Las mini cocinas ya lo hacen posible y presentan, además, muchas otras ventajas. No necesitan obras para su instalación, ocupan el mínimo espacio, aportan la máxima funcionalidad con un acabado compacto y su diseño, además, no pasa de moda. 

Ahora es posible el anhelado «todo en uno»: el lavavajillas, la encimera, el microondas, el frigorífico, la cocina y el fregadero forman parte de un mismo combo, mucho más económico que las tradicionales cocinas hechas a medida. 

Tipos de mini cocinas compactas 

En función de su altura, encontramos distintas opciones de mini cocinas en el mercado. Las mini cocinas compactas integradas reúnen, en un único armario, la zona destinada a cocinar y el fregadero, mientras que la nevera y el lavavajillas permanecen ocultos a la vista. Por su parte, las mini cocinas compactas con armario bajo se organizan en vertical. En la parte superior se acoplan las alacenas y espacios de almacenaje y la zona inferior se destina a los electrodomésticos integrados. 

Un aspecto interesante de estas mini cocinas compactas es que, tanto las integradas como las organizadas en vertical, permiten un alto grado de personalización: podremos elegir la cantidad de baldas y espacios de almacenaje que queremos incluir y la posibilidad de dejar los electrodomésticos a la vista u ocultarlos con puertas o persianas extensibles. Esta última opción esconde la cocina por completo cuando no está siendo utilizada: perfecta para mini cocinas ubicadas en coworkings, residencias de estudiantes, oficinas o casas diáfanas en las que no existan paredes que separen los espacios. 

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Mini cocinas: en dónde ubicarlas  

Llegados a este punto ya sabemos bien por qué las mini cocinas son la mejor opción para un espacio reducido (cuentan con un diseño atemporal, larga vida útil, no requieren instalación, abaratan costes, exprimen al máximo los metros cuadrados y son de fácil cuidado), así que solo nos queda conocer qué necesitamos para transformar ese pequeño rincón de nuestro hogar en la mini cocina que estamos buscando. 

El primer paso es decidir cuál es la ubicación ideal de nuestra mini cocina (y no te engañamos, quizás esta sea la tarea más difícil). Con preferencia elegiremos espacios abiertos, con luz y buena ventilación, evitando esa sensación visual de agobio que nos llega ante los espacios opacos y lúgubres. Un buen ventanal con entrada directa de luz natural será una opción perfecta para acompañar nuestra mini cocina. 

Mini cocinas: los mejores muebles  

El segundo paso es elegir tus muebles con sabiduría. Será un acierto decantarse por todas esas opciones que te permiten un máximo aprovechamiento del espacio y que no ocupan nada cuando no las usamos. Sillas y mesas plegables, armarios con puertas correderas y muebles esquineros serán tus mayores aliados. Los muebles móviles, como los carritos, son una gran opción para añadir versatilidad a estos ambientes, además de un excelente lugar para guardar tus utensilios que te ayudará a tenerlo todo ordenado. 

Espacios de almacenaje 

El orden es fundamental en cualquier cocina, pero en una cocina mini más aún. Ante la escasez de espacio no tener los utensilios recogidos ni espacio para guardarlos dará una sensación de caos, suciedad y estrechez. 

Diseña tu mini cocina pensando siempre en los espacios de almacenaje: los armarios esquineros, los muebles modulares y las cajas herméticas multiusos son excelentes opciones para que todo ocupe su lugar y libere las superficies. ¡Qué respiro y qué armonía conseguimos con ellos! 

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Mini cocinas: ideas de decoración 

Una vez que ya sabes dónde ubicar tu mini cocina y cuáles son los mejores muebles todoterreno que te harán ganar espacio, ya podemos ponernos manos a la obra con la decoración. En Westwing estamos decididos a hacer que tu pequeño espacio se transforme en una cocina envidiable y sabemos qué hacer para conseguirlo. Pues, con los electrodomésticos integrados y suficiente espacio de almacenaje para mantener en orden los elementos básicos, estamos preparados para añadir los consejos de decoración de nuestros expertos. ¡Allá vamos! 

¿Falta de espacio? ¡Imaginación al poder! 

Y es que no hay un problema que la creatividad no resuelva. Si crees que tu mini cocina es demasiado pequeña para incluir un espacio para comer, te equivocas. En Westwing te traemos un truco de decoración ideal para las cocinas mini: crea un rincón de comedor original con una pequeña barra de bar. Con ayuda de una balda y un par de soportes de pared será suficiente para construir este espacio destinado a hacer que te sientas en un bar de moda cada vez que desayunas o te tomas un aperitivo en la barra. 

Si prefieres optimizar al máximo el espacio cuando no lo estés usando, las mesas plegables o extensibles son otro clásico de las mini cocinas que podremos recoger cada vez que no necesitemos apoyar el menaje. ¡Las posibilidades son múltiples y con un poco de imaginación conseguimos vencer los límites que impone el espacio! 

Plantas de aire: el toque orgánico 

A pesar de su reducido espacio, las mini cocinas pueden permitirse esos pequeños elementos decorativos que tanto alegran la vista. Las plantas de aire son una opción perfecta y que no ocupará espacio sobre las superficies si nos decantamos por un bonito terrario colgante que penda directamente del techo. 

Colores brillantes: crea un ambiente divertido 

Es pequeña, sí, pero quieres que destaque. En ese caso puedes atreverte con un toque de color brillante para la decoración de tu mini cocina. Y es que esta es una de las ventajas de un espacio reducido: la experimentación está permitida porque siendo un lugar de pequeñas dimensiones no corremos el riesgo de que resulte muy invasivo ni demasiado chillón en el ambiente. 

Luminosidad: apuesta por el blanco  

Si tu objetivo es generar sensación de luminosidad y amplitud, el blanco es el color ideal para engrandecer cualquier espacio. En ese caso, una buena paleta en tonos claros se convierte en un básico para la decoración de toda tu mini cocina: apuesta por armarios blancos y respeta el cromatismo en estanterías y menaje, especialmente aquel que se encuentra a la vista, como tarros de especias, platos, vasos, tazos o utensilios colgantes. 

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Mini cocinas en blanco: perfectas para todos los estilos 

Además, una de las grandes ventajas de elegir el blanco en tu mini cocina es su gran adaptabilidad a todos los estilos. No importa si lo tuyo son las cocinas rústicas, las cocinas shabby chic, las cocinas vintage o las cocinas minimalistas, las cocinas en blanco y los tonos pastel triunfan en su fusión con todas las tendencias, por lo que elegir los muebles de madera blancos será una apuesta sobre seguro.  

¿Verdad que ya no ves con los mismos ojos ese rincón que te parecía imposible de aprovechar? En Westwing estamos felices de colaborar a la inspiración y hacer posible que cualquier pequeño espacio se convierta en la mini cocina perfecta que tienes en mente. 

¡Completa tu mini cocina con accesorios de Westwing!