Cómo hacer una habitación vestidor en 6 pasos

Si deseas convertir una de las habitaciones de tu casa en vestidor, aquí encontrarás los consejos y pasos a seguir. Te damos las mejores opciones para saber cómo crear una habitación vestidor y transformar un espacio sin uso en una zona práctica y estilosa para cambiarte y prepararte para el día a día. ¿Armarios abiertos o cerrados? ¿Y si incluyes un tocador? ¿Cuáles son los accesorios imprescindibles para diseñar un vestidor al detalle? Contestamos a estas y otras preguntas para que disfrutes de un cuarto en el que tus prendas de vestir y complementos estén perfectamente organizados.

Contenido

Cómo diseñar y organizar un vestidor en 6 pasos

Una buena planificación es la mitad del trabajo. Especialmente en un espacio pequeño, el espacio no debe desperdiciarse, por lo que debes planificar el espacio de almacenamiento y el mobiliario de tu vestidor de forma inteligente, funcional y práctica.

Los 6 pasos para hacer un vestidor.

Analiza qué cantidad de ropa y accesorios tienes
Una vez hayas escogido la habitación de la casa que vas a dedicar a vestidor, analiza tu ropa con precisión. Solo así, determinando lo que vas a tener que almacenar, sabrás el equipamiento preciso.
Planifica el espacio y la distribución de los diferentes módulos
Barras para colgar, estantes, cestas, módulos pantaloneros, cajones para ropa interior y de deporte, cajones y ganchos para joyas y accesorios, una zona para fulares y bolsos, zapatero… Toma medidas y anota. Haz un dibujo de tu habitación vestidor, encajando cada módulo en la disposición más cómoda para ti, por categorías, como si fuera un puzzle o tetris. Ajusta el diseño a tus necesidades.
Crea un diseño que aproveche el espacio al máximo
Aprovecha el cuarto, de suelo a techo. En la zona baja y alta, coloca las cosas que menos utilices. A la altura de la vista, lo que más.
Diseña un vestidor que sea práctico para tu día a día
Recuerda que las baldas y las barras son más prácticas que los cajones. Todo lo que cuelgas te lo pondrás con más frecuencia. Así que, crea un vestidor flexible con mayoría de estos elementos.
Ilumina bien tu habitación vestidor
Incorpora iluminación general, puntual y de ambiente. Una bonita lámpara de techo dará personalidad a este cuarto, mientras que unas tiras led integradas en las baldas o en la parte inferior de los estantes crearán una escena funcional y acogedora. Apuesta por luces cálidas.
Añade decoración
Una vez tengas lo esencial, decora tu habitación vestidor con una butaca o banco para calzarte, una alfombra para una pisada cálida, un ramo de flores sobre una isla o estante, cestas o cajas decorativas, unos pomos bonitos, etc.

Habitación antes

Habitación después

Paso extra: habitación vestidor con tocador

Si te cabe, incluye una zona de tocador en tu habitación vestidor. Aquí tienes 6 ideas para elevar el look de tu vestidor:

Si dispones de un vestidor pequeño, una mesa estrecha de 40 cm de fondo es suficiente. Añade una silla o puff que se pueda guardar debajo del sobre cuando no se use.
Un mueble antiguo dará el toque coqueto al ambiente. Si incluye cajones, tendrás la superficie más despejada.
Sobre la superficie de acción puedes colocar un espejo de sobremesa o, si tienes espacio, un espejo de pared grande, que de amplitud.
Incluye bandejas, botes y organizadores de todo tipo para tener tu maquillaje y cremas en perfecto orden.
Un aplique de luz puntual en esta zona te ayudará a realizar las tareas beauty con más precisión.
Un accesorio para collares y un joyero bien compartimentado es también un imprescindible de esta zona.

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Cómo hacer un vestidor para cada tipo de habitación

Si ya has decidido dedicar una de las habitaciones de tu vivienda a vestidor, ten en cuenta que el espacio deberá contar como mínimo con 4 metros cuadrados. Son medidas aproximadas para un vestidor de dos personas.

Habitación vestidor en forma de U

La distribución de tu vestidor estará condicionada por la forma de la estancia, ya sea cuadrada o rectangular, las dos opciones más habituales. En las habitaciones cuadradas, la distribución en U de los módulos de almacenaje suele ser la más funcional. En las estancias rectangulares puedes optar por una distribución en L o en paralelo de los armarios.

Los vestidores hechos a medida son los que más y mejor aprovechan el espacio de una habitación, sin duda. Eso sí, resultan más costosos que los realizados con módulos estandarizados.

Puedes transformar una habitación en vestidor en 3 pasos.

Mide el espacio
Utiliza la pared que quede vacía
Añade los últimos detalles

En esta mini guía hemos te detallamos cada paso.

Si no sabes qué tipo de muebles colocar aquí tienes un moadboard para inspirarte.

Habitación vestidor en el dormitorio

No necesitas un gran presupuesto para hacer un vestidor. Los burros para la ropa, las baldas de pared y los zapateros son suficientes.

Si dispones de más espacio puedes separar los ambientes de dormir y vestidor. Coloca un gran armario compartimentado paralelo a una pared (no contra la pared) y coloca estanterías y barras para la ropa al otro lado del armario compartimentado, y así crearás fácilmente un vestidor.

Habitación vestidor y baño

Si tienes la suerte de tener un gran dormitorio en suite, puedes aprovechar el espacio al máximo creando una pequeña zona de vestidor. Coloca el espacio del vestidor entre la cama y la entrada al baño para que haga de separador de ambientes.

Habitación vestidor y despacho

Si tu dormitorio es demasiado pequeño para añadir un vestidor, también puedes hacerlo en otra habitación de tu casa. Por ejemplo, en el despacho. ¿Quieres mantener el vestidor separado del despacho? Entonces elige puertas correderas para cerrar tu vestidor. Descubre grandes ideas para hacer un vestidor barato en cualquier lugar de la casa en nuestro artículo vestidor low cost.

Consejo de lectura: aprende más sobre el orden en los armarios con nuestros artículos de organización de armarios y un artículo para principiantes sobre el método Mari Kondo de la organización.

Ventajas y desventajas de un vestidor abierto

Después de definir la habitación de la casa destinada a vestidor, llega el momento de plantearte si quieres un vestidor abierto o cerrado. Para acertar, sopesa las ventajas y puntos débiles de cada opción, para dar con la que más te convenga. Te damos los argumentos para que valores y elijas:

Ventajas	Desventajas
Si la habitación es especialmente pequeña, la ausencia de puertas te hará ganar espacio, ya que no necesitarás dejar hueco frontal para abrirlas.	El polvo y los olores serán el punto más débil de esta alternativa. Por eso es importante elegir una habitación con ventana, para poder ventilarla.
Todo está más a mano y visible. Te será más fácil montar looks y localizar prendas, de un vistazo.	El orden se hace imperativo. Aquí no hay nada que esconder ni puertas que lo tapen…
Si está bien organizado y ordenado, te será más fácil y rápido vestirte. ¡El tiempo es oro!	Mucha información visual. A no ser que lo tengas organizado por colores, al estilo arcoíris, la presencia de muchas y distintas prendas puede crear ruido visual.
Low cost. El presupuesto se reduce, ya que al no tener puertas, eso que te ahorras. Se estima que un vestidor abierto resulta entre un 30 y 40% más económico que uno cerrado.
Ligereza visual. Los módulos no resultan pesados y el espacio respira más.

Habitación vestidor cerrado: opciones de puertas con estilo

Si la opción de vestidor abierto no es para ti y te decantas por un lugar más limpio y recogido, te damos las opciones de puertas más prácticas y elegantes:

Armarios con puertas abatibles: es el tipo de puerta con la apertura más común. Su punto fuerte es que dejan ver el interior del armario por completo. Eso sí, debes prever un espacio frontal de unos 60 cm para abrir una puerta de 50 cm cómodamente.
Armarios con puertas correderas: están indicadas en habitaciones estrechas, ya que con un espacio de unos 40 cm para ponerse delante del armario ya es suficiente. Al una puerta deslizarse sobre la otra, difícilmente quedará todo el espacio interior al descubierto.
Cortinas: si no quieres que el presupuesto se te dispare, esta es la opción más acertada para cerrar unos armarios de vestidor.

Dos tipos de acabados para las puertas de tu vestidor:

Puertas ciegas: no dejan ver el interior del armario. Pueden ser frentes de madera, DM lacado, melamina, chapadas, de espejo, vidrio oscurecido o ahumado, cannage…
Puertas de cristal: traslúcido, que deja ver todo su interior, pero preservado del polvo. O bien opaco, que aporta ligereza y dejar entrever las prendas, pero no de forma evidente.

Consejo Westwing: cuando diseñes tu habitación vestidor, no pongas más de dos acabados en los frentes y apuesta por una estética coordinada y armónica. La combinación de puertas blancas y espejo agrandan el cuarto. También puedes alternar madera y laca o madera y cristal.